Los trabajos incluyeron el Puente de las Mujer, los cruces de Puerto Madero, el puente de Juan B. Justo y algunos pasos bajo nivel. Es para proteger el patrimonio y optimizar el traslado de automovilistas y también peatones.

Forman parte del patrimonio de la Ciudad de Buenos Aires. Y también son una herramienta clave para el traslado de miles de vecinos a diario. Sin embargo, no estuvieron exentos del paso de los años y el vandalismo. Por eso, el Gobierno porteño inició en los últimos meses la puesta en valor de 30 puentes y túneles que presentaban falta de mantenimiento, roturas y problemas.

Las tareas, que estuvieron a cargo del Ente de Mantenimiento Urbano Integral (EMUI), incluyeron el emblemático Puente de la Mujer y todos los cruces de Puerto Madero, además de otros accesos como los Puentes Reconquista, Garrahan, Bosch, Otamendi y los pasos bajo nivel de Del Libertador, Mosconi, Carranza y Dorrego, entre otros.

En el caso del Puente de la Mujer y los cruces de Puerto Madero, se realizan trabajos de asistencia técnica y auditoría en el mantenimiento en conjunto con la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). También se repararon y pintaron las barandas y se adecuó la iluminación exterior y la pasarela con nueva tecnología.

En otras áreas más congestionadas, los trabajos apuntaron a mejorar la accesibilidad. Esto abarca el asfalto, la señalización, la iluminación y las veredas aledañas. En el túnel de Del Libertador, se reparó el dren hidráulico que estaba deteriorado y se renovó la capa de rodamiento. En Mosconi, en tanto, se reemplazó el cordón central de hormigón, lo que obligó a mejorar la demarcación horizontal y lateral sobre el asfalto. Por último, se puso en valor el puente de la Reconquista (en Juan B. Justo) y su entorno: se pintó toda la estructura, se repararon los sumideros y se readecuó el separador central de hormigón.

Fuente: La Razón, 12/06