Por Liliana Mestanza, Design Team
Fontenla, (www.fontenla- furniture.com)

La madera es un elemento tradicional dentro de la decoración y la arquitectura. Su nobleza y versatilidad la han convertido en un material buscado y utilizado para brindarle calidez a todos los ambientes. Estas virtudes la han catapultado a ser tendencia en diseño de interiores de baños, un espacio que bien resuelto puede brindarnos el ansiado relax cotidiano.

Aunque para muchos la madera en el baño no podía pasar de la mesada, hoy los tratamientos para protegerla posibilitan usarla en todo tipo de artefactos, desde las bachas hasta revestimientos de bañaderas.

En términos de estilo se prefiere que la madera luzca su belleza natural, con las vetas visibles por debajo del lustre y el acabado. En cuanto a formas se usan las simples, aquellas que no compiten con los atributos que ya de por sí transmite este material. Cantos redondeados o angulosos, las dos opciones están bien siempre que sean de cortes limpios. Así se le quita al baño ese aspecto aséptico y frío que puede tener, pues es un cuarto que debe tenerse en cuenta para que continúe la línea de diseño que tenga el resto de la casa.

Muchos instalan en el baño su spa privado, una costumbre que tiene cada vez más adeptos. Es así que la madera entra en el cuarto en distintos rincones. En estos casos, por supuesto que el sauna debe ser en madera, con un deck como piso y bancos de listones. Incluso, puede ser de aspecto rústico en las casas de estilo campestre.

A la hora del baño, la ducha puede tener una base de madera. Una idea muy original es armar un espacio previo al área húmeda con una pared de ladrillos de madera. Allí se puede crear un mini vestuario para estar antes y después de bañarse.
En cuanto a condiciones, es importante que se utilice una madera maciza como el viraró, lapacho, algarrobo o cedro. También hay especies tropicales que tienen una gran resistencia a la humedad pues es lo que viven en sus ámbitos naturales.

Para protegerla hoy el mercado ofrece lacas poliuretánicas que dan buen resultado. Lo mejor es aplicar dos capas para evitar filtraciones y también darle al baño una buena ventilación para que se no acumule demasiada humedad en él. Por último, en el mantenimiento no hay que usar productos abrasivos, basta con un trapo húmedo y detergente neutro.