Luego de un año 2013, que cerrará con un crecimiento de la actividad entre el 6 y 7%, estimamos que en el año 2014 se continuará con un crecimiento significativo del sector, en ese orden.

Las perspectivas, en general favorables, tienen distintos matices según el tipo de actividad constructora y según la región.

La aprobación de un Presupuesto nacional para 2014, que destina a inversión pública un 37% más que la Ley de Presupuesto para 2013, hace prever que la obra pública nacional seguirá traccionando la actividad, como en el año que termina.

Dentro de la actividad pública, entendemos que continuará la importante incidencia de la inversión en Vivienda Social, superando incluso los niveles alcanzados en los últimos meses, lo que es fuente de empleo y actividad económica distribuida en todo el territorio nacional y fuente de trabajo para numerosas empresas constructoras medianas y pequeñas, de todas las regiones.

En otro sector de la actividad, estimamos que continuarán las obras de infraestructura, realizadas con fondos del Tesoro Nacional, previstas en la ley de Presupuesto citada. Son precondición para la mejora de la competitividad del país.

Esperamos que, durante el año, puedan comenzarse las muy importantes obras energéticas, en particular presas hidroeléctricas, en proceso de contratación o licitación, que contarán con el aporte de financiamiento externo.

Si bien la inversión pública es importante, representa solo alrededor del 25 al 30% de la actividad del sector. Por ello resulta vital para el sector, el análisis de las perspectivas sobre el desarrollo de la inversión privada.

En el sector de la Vivienda media, estimamos que seguirá siendo fundamental el desarrollo del Plan Procrear. Cabe señalar que, si bien estas obras son formalmente obras privadas, son posibles por el financiamiento de un Fideicomiso, fondeado por ANSES y el Tesoro. Esperamos que durante 2014 puedan concretarse alrededor de 54 mil viviendas individuales sobre terreno propio y otras 34 mil viviendas multifamiliares, en terrenos públicos cedidos al efecto.

La construcción de viviendas para el mercado inmobiliario continuará siendo la rama de nuestra actividad menos beneficiada, en particular en la Ciudad de Buenos Aires y en los demás grandes centros urbanos. Los permisos de construcción siguen estancados y ello es un indicador de escasa actividad futura en el sector.

La gran repercusión y favorable acogida en el público de los proyectos financiados por el Plan Procrear, señalan que el verdadero problema a resolver, para posibilitar el acceso a la vivienda de una amplia capa media de la población, es el del financiamiento a largo plazo al comprador. Nuestra Institución ha hecho propuestas al respecto y entiende que es conveniente intensificar el estudio de posibles soluciones

En ese sentido, sería importante concretar y extender las herramientas de ahorro, destinadas al pequeño inversor, vinculadas a la actividad real, como el Fideicomiso de Inversión en Metros Cuadrados, anunciado por la CNV, cuyos detalles aun no conocemos.

Estimamos que el próximo año, la inversión privada en reformas, ampliaciones y obras realizadas sin permiso municipal, seguirá representando el 50% de la actividad.

Esto es fuente de actividad, explicando los consumos records de cemento, alcanzados en 2013. Lamentablemente no tiene la misma incidencia sobre el nivel de empleo formal, pues suelen ser tareas ejecutadas por monotributistas o por personal no registrado.

En resumen, estimamos que 2014 será un año favorable para el sector, como lo fue 2013, pero no podemos dejar de decir que debe persistirse en el esfuerzo inversor, llevándolo a niveles aun superiores a los registrados en los últimos años, para consolidar la inclusión social, la integración del país y la mejora de su competitividad.

Fuente: INFONEWS