“Este es un espacio de encuentro entre las Instituciones platenses, la Universidad, organismos públicos y privados y las empresas, con la intención de generar puentes para pensar el desarrollo futuro de la región”, explicó el ingeniero Jorge Ctibor, presidente de la Fundación Espacio Ctibor y de la empresa Cerámica Ctibor, en la inauguración del primer Museo del Ladrillo en el país. Ante el Intendente de La Plata, Pablo Bruera, el embajador de la República Checa, Stepan Zajac, y más de un centenar de empresarios y ciudadanos platenses, el Ing. Ctibor añadió: “Esta iniciativa comenzó a fines del siglo pasado, en el mismo lugar donde hoy se emplaza el Museo, donde funcionó hasta 1995 la primera fábrica de ladrillos a vapor, fundada en 1905 por Francisco Ctibor, un inmigrante checo que había llegado al país cinco años antes por las prometedoras oportunidades laborales”.
A mediados de los noventa, resultó necesario un cambio de tecnología y ubicación y en 1998 la empresa Cerámica Ctibor mudó su planta, declarada patrimonio municipal, al Parque Industrial de La Plata. Las antiguas oficinas administrativas de la fábrica comenzaron a ser restauradas en 2005, buscando la puesta en valor del edificio. “Éste ha sido reciclado conservando su estética y su historia. Se ha trabajado en la recuperación de espacios, voces, herramientas, maquinarias, documentos, fotografías y planos que la familia resguardó durante tantos años, dándole un nuevo sentido a toda una vida de trabajo”, afirmó el presidente de la Fundación.
“Estamos deseosos de que el Museo forme parte de la historia y el patrimonio cultural de la Ciudad”, anunció el Intendente de La Plata, Pablo Bruera, quien felicitó y agradeció a la familia Ctibor por esta iniciativa que habla del “compromiso, la ética y la responsabilidad social que tienen nuestros comercios y empresas”. El embajador de la República Checa, Stepan Zajac, destacó la “excelente e ingeniosa idea de honrar a través del primer Museo del Ladrillo este objeto tan simple que se hace con tierra”. Además, se mostró orgulloso de “como representante de la República Checa en una nación tan joven como Argentina, muchos edificios patrimoniales que están construidos con ladrillos amasados por checos”.
El Museo del Ladrillo fue reciclado con un concepto contemporáneo de diseño que mantiene la memoria y el patrimonio industrial, tal como lo pensó el ingeniero Jorge Ctibor a la hora de encargar el proyecto a un equipo de profesionales. La totalidad de los elementos restituidos -maderas, ladrillos, metales, herrajes y aberturas, etc.- son originarios del establecimiento fabril, que fueron cuidadosamente estibados por el Ing. Ctibor. En el proceso de los estudios preliminares junto a los trabajos de cateos, los arquitectos descubrieron algunos objetos históricos que fueron sumados a la colección.
El Museo cuenta con cinco salas con temáticas diferentes y un producto que las unifica, el ladrillo. La sala 1 presenta el escritorio familiar, la muestra el establecimiento fabril en la Ciudad naciente, la 3 cuenta el proceso de producción de ladrillos y el cambio tecnológico, la 4 contiene el Horno Hoffmann, y última es la sala del producto actual con todos los ensayos y controles que actualmente se realizan. “Recorrer los espacios de este museo nos permitirá transportarnos al pasado de la industria ladrillera, a los más de 100 años que venimos dedicándonos a la fabricación de ladrillos, dando constancia además de numerosas piezas representativas de la historia de nuestra región”, explicó el Ing. Ctibor en la inauguración.
La reutilización de perfiles en la estructura y producción de pisos de madera flotante in situ procesando viejos maderos de la planta industrial, le imprimen un acento particular al dialogo entre distintas épocas. El conjunto se rodea por el jardín, que conserva las especies originarias del entorno. Los nuevos productos de la firma Ctibor dirigen a los visitantes hacia la antigua escalera que lleva a recorrer los ámbitos representativos de las distintas épocas. Balconeando al mismo tiempo sobre el jardín histórico observamos como telón de fondo el horno de ladrillos Hoffmann y sus chimeneas, hitos fundacionales de la planta y el poblado de Ringuelet.

Más información en www.museodelladrillo.com.ar y www.ceramicactibor.com.ar

Ficha Técnica: Museo del Ladrillo

Calle 514 Nº 1905 -entre camino Centenario y camino General Belgrano-, Ringuelet

Coordinación General: Ing. Jorge Ctibor.
Proyecto y Dirección Técnica: Arq. Guillermo Rubén García.
Puesta museológica y museográfica: Arq. María Cristina Avinceta, museóloga Verónica Wolcoff, Andrea Pouchou, Dra. M. Victoria Ctibor y Lic. Eugenia Ctibor.
Coordinación de ejecución: Arq. Roberto Forgia / Ing. Pedro Grossi.
Paisajismo: Ing. Agr. Natalia Pouchou.

Sistema de carpinterías: Hydro Building Systems Argentina – Technal.
Sistemas de herrajes para carpinterías de aluminio: Roto Frank.
Fabricación y montaje de muro cortina: Orión Aluminio.
Electricidad e iluminación: Fernando Rubbi
Verificación estructural: Ings. Igolnikow-Sánchez.
Control de humedad: Sistema Watertec.
Zingueria: Brianese.
Diseño gráfíco y señalética: Estudio Volk.
Panelería de acrílico: CABI.
Comunicación audiovisual: Tetsuo Lumiere
Diseño Industrial: Estudio Vivas Marquez
Operarios: Personal de la firma Ctibor capacitados por la Dirección de Obra.