Hasta mediados de febrero funcionará a puertas cerradas, sin atención al público. Cuando funcione a pleno podrá atender alrededor de 100.000 consultas anuales.
El edificio, con una superficie de 10 mil metros cubiertos, está ubicado en la calle Paso de Los Andes.
Médicos, técnicos, ingenieros y directivos de la Universidad Nacional de Cuyo encabezados por el rector Arturo Somoza presentarán formalmente hoy, desde las 20, al hospital escuela, terminando con largos años de espera y poniendo fin a una ansiedad de larga data.
Con equipamiento de alta tecnología inexistente en la provincia, sistemas de comunicación que permiten que la información circule punto a punto y nuevos conceptos en cuanto al tratamiento de los pacientes, quienes llevan adelante este proyecto no tienen dudas en asegurar que las posibilidades que va a brindar este hospital son infinitamente mayores.

“Esta forma de trabajar se denomina plataformas tecnológicas de salud activa. Los hospitales más importantes del mundo funcionan bajo este concepto”, señaló la directora general del Hospital Sara Pappa. Así, todos los pacientes tendrá una historia clínica única y digitalizada, lo que proporcionará mayor dinamismo en el tratamiento de las personas y le permitirá a los profesionales un entendimiento más integral de la problemática de los enfermos.

Por ahora, una primera etapa

Cabe destacar que a partir de hoy el nosocomio funcionará bajo la modalidad de “hospital protegido” que es a puertas cerradas, sin atención al público, con la idea de que para mediados de febrero todos los materiales de trabajo hayan sido adecuadamente testeados “aún en nosotros mismos”, explicó uno de los bioingenieros a cargo de la maquinaria médica.

A mediados de febrero o principios de marzo, los servicios de la planta baja y subsuelo estarán disponibles para los pacientes. Estos servicios incluyen: clínica médica, quirúrgica, pediatría, obstetricia, ginecología y odontología, cada una con sus dependencias. Además habrá un área destinada especialmente a rehabilitación.

“Queremos ir despacio porque queremos hacerlo bien, todo va a estar probado antes de que lo use la gente”, agregó el vicerrector.

De manera simultánea con su apertura, el hospital avanzará además en la remodelación de sus áreas críticas (las cuales incluyen internación) para implementar otras etapas de su proyecto de atención y formación de profesionales.

Financiamiento del proyecto

El proyecto, hasta el momento, le ha costado a la Universidad unos 25 millones de pesos que incluyen la remodelación del viejo hospital ferroviario y la compra material de trabajo. Parte del dinero necesario para el futuro saldrá de una partida proveniente del Ministerio de Educación de la Nación. Este dinero forma parte de una partida destinada a hospitales universitarios.

Además se prevén otros ingresos provenientes de donaciones, subvenciones, subsidios y legados.

Cabe aclarar que el hospital funciona como órgano descentrado de la universidad con un régimen administrativo y financiero propio aunque con el control del rectorado y del concejo superior.

¿Quiénes podrán utilizarlo?

En principio, los destinatarios de los servicios será la comunidad universitaria. También los usuarios de los servicios de salud con cobertura a partir de acuerdos y convenios con entes financiadores de la salud, y sin cobertura a partir de convenios con el Estado Nacional y Provincial, además de los usuarios con capacidad de pago que opten privadamente por los servicios del hospital.

Fuente: Los Andes de Mendoza, 20/12