Para este año se estimaron inversiones por unos 14.000 millones de dólares en el plan de viviendas Procrear, la construcción de redes de agua potable y cloacas por parte de la estatal AYSA, entre otros desarrollos en infraestructura.

La inversión prevista para este año “se ubica en 2.500 millones de dólares por encima de lo que se ejecutó en 2016 y ya es el 2% del PBI (Producto Bruto Interno), que es un número importante para la obra pública”.

Se aspira a 6% del PBI para la inversión pública. Hay que potenciar también el desarrollo de la inversión privada. Se están poniendo en marcha licitaciones que se han desarrollado durante 2016.

En el segundo semestre de 2016 se abrieron licitaciones “que van a empezar a ejecutarse”, entre ellas en la empresa estatal de agua y saneamiento AYSA.

“Hay obras de viviendas que estaban paralizadas y con los nuevos precios están en ejecución. Hay una visión de obras pequeñas y medianas pensadas para los territorios y las ciudades, que están pensadas sobre la base de las necesidades puntuales de inclusión social, como obras de mejoramiento del hábitat y de competitividad, productividad, caminos; obras que no tienen un impacto macroeconómico, pero tienen un impacto a nivel loca.

Se está avanzando para que comiencen las obras de la represa de Chihuido, en Neuquén. La obra empezará seguramente este año y será emblemática. También está en proceso la transferencia del plan Procrearta. Allí también va a haber obras que se van a reactivar, como proyectos urbanísticos nuevos.

El Procrear va a ser una de las líneas de acción principal que va a tener la Secretaría de Vivienda este año y diría también todo lo que es AYSA, con casi $20.000 millones de presupuesto para 2017: habrá una expansión de la red de agua y cloaca muy significativa. El programa de viviendas va a ser financiado con una parte de fondos del Tesoro y se aspira a que los bancos “particularmente el Banco Nación, tengan un rol activo”.

Este año la Secretaría de Vivienda y Hábitat cuenta con un presupuesto “que será un 28% más alto que el de 2016″, lo que significa que “con una inflación del 17% a 18%”, el organismo “estaría ganando 10 puntos en términos reales”.