Las obras tienen 80% de avance. Ya se ha finalizado el montaje de la cubierta, la carpintería en ventanas, pintura y la instalación de la cañería para el cableado eléctrico de cinco cursos, sanitarios y una preceptoría. Ahora intervienen los cielorrasos. Inversión de $2.500.000.

La Subsecretaría de Infraestructura Social Básica sigue sin pausa con la ejecución del remplazo completo de cielorraso y cubierta de techo de cinco aulas, un grupo sanitario y una preceptoría de la Escuela Técnica Agraria 4-007 Miguel Amado Pouget, de Guaymallén, bloque estructural que sufrió un incendio en 2016.

La obra,  comprende la reparación de todo el sistema eléctrico, que asimismo fue destruido por el fuego. Esto significa que se trata de un trabajo de gran magnitud e importancia para la comunidad educativa de la escuela, dado que se está haciendo una remodelación integral del edificio. En este sentido, la firma contratista ya culminó con el montaje de la nueva cubierta de techo (chapas de zinc y cabriadas de hierro), la carpintería en ventanas, pintura de muros y la instalación de la cañería para el cableado eléctrico, que fueron afectados por el siniestro.

Se están interviniendo los cielorrasos suspendidos de todos los espacios dañados por el fuego. Las placas de yeso remplazarán al viejo cielorraso de machimbre.

La escuela Pouget, ubicada sobre la calle Profesor Mathus de El Bermejo, sufrió el año pasado un incendio que provocó serios daños en la estructura y el sistema eléctrico de todo un bloque de aulas ubicado en el sector sur del establecimiento. Por esta razón, Infraestructura Social Básica puso en marcha rápidamente el proyecto para la refacción del inmueble siniestrado. De no mediar contratiempos, los trabajos estarán terminados en setiembre.

La obra se ejecuta con recursos del Ministerio de Educación y Deportes de la Nación, que fueron gestionados en conjunto con la Dirección General de Escuelas. Los trabajos cuentan con una inversión de $2.500.000 y un plazo de ejecución de tres meses.

Como se trata de un bloque aislado del resto del edificio de la escuela, los trabajos de reparación no perjudican el normal dictado de clases. Mientras dure la obra, el lugar ha sido cercado y vallado por la empresa contratista, para más seguridad de alumnos y docentes.