Todos los años, siete millones de personas visitan la Torre Eiffel, de los cuales el 85 por ciento son turistas extranjeros.

Paradójicamente, el espacio más amplio es el menos visitado y se espera que el lugar se convierta en un espacio dedicado a la pausa final con servicio de plaza y alimentación.

Las reformas comenzaron en mayo de 2012 y costaron 30 millones de euros. Donde el piso era opaco hay un suelo en vidrio, material del que también están hechas las paredes. Las reformas pretenden estimular la visita de turistas a 57 metros de altura.

Las otras dos plataformas, que son las más visitadas están a 115 y 276 metros.

Los dos pabellones, este y oeste que datan de 1981, fueron demolidos y reconstruidos. En el lado este, el salón Gustave Eiffel será un local de recepciones y conferencias; mientras en el lado oeste, el pabellón Ferrié albergará locales comerciales y de comidas, además de una sala de proyección.

Fuente: Diario Norte, Chaco