Se realizó en dependencias de la Universidad de Magallanes (Umag) el lanzamiento del libro “Propuesta Ciudadana de Energía para Magallanes”, cuyo objetivo es hacer partícipe a la comunidad en la definición de la materia matriz energética que debería tener Chile.

Diseñar una política de transición energética constituye un paso importante para transformar modelos de desarrollo poco sustentables a modelos sustentables y hacer un aporte a la transformación de nuestras sociedades con efectos sociales, económicos y ecológicos positivos. Creemos que el esfuerzo de la mesa ciudadana de energía para Magallanes es un esfuerzo que va exactamente en esa línea.

En la región hay una crisis de energía hace mucho tiempo y no podemos estar esperando que desde Santiago resuelvan los problemas. Así que hay varias propuestas para cambiar un poco la matriz energética, es un aporte al debate para anticiparnos a los problemas que estamos teniendo en energía.

Propuestas

Entre las principales propuestas surgidas de la primera etapa de trabajo, se encuentran la redistribución gradual del subsidio del gas hacia la eficiencia energética, de manera de lograr una disminución en el consumo sin afectar el nivel de confort. Es decir, los fondos ahorrados se deben invertir en el desarrollo de una matriz que asegure el abastecimiento del futuro por ejemplo, en políticas de incentivo a las energías renovables.

Se plantea establecer una estrategia regional de eficiencia energética que incluya capacitación para disponer de personal calificado local; un plan de educación en eficiencia energética a la población; incentivos al ahorro y un incremento a los montos destinados a los instrumentos del Minvu, entre otros elementos.

Se expone como necesario sustituir el consumo del gas que hoy se utiliza para la generación de energía eléctrica por la utilización de energía eólica en su máximo técnico, entendiendo que se necesitan energías de respaldo. Se refiere el uso del gas como respaldo para la seguridad y estabilidad de suministro para las energías renovables, debido a la variabilidad del recurso. Y dado que no resultaría viable en el corto plazo que la calefacción sea vía eléctrica, se propone un plan de eficiencia energética para la calefacción vía gas y que el crecimiento de las ciudades se proyecte con nuevas fuentes de energía.

El texto expone que las comparaciones de valores con respecto a las distintas fuentes de energía para su entrada al mercado, deben tomarse en base a aquellos costos sin subsidio.

Como una de las conclusiones preliminares más allá de los planteamientos, es importante determinar cómo se debe planificar una ciudad para que exista a la vez una matriz sustentable de energía. “No podemos seguir construyendo y ampliando nuestras ciudades en Magallanes, sin pensar en el problema energético que tenemos. ¿Con qué vamos a calefaccionar esas casas? ¿Nos estamos haciendo esas preguntas?”.

La energía eólica en Magallanes presenta uno de los mejores factores de planta del mundo y sin embargo, no se está aprovechando. Es primordial pasar de la lógica del gasto de subsidio a la inversión en ahorro. “No se trata de eliminar el subsidio y que la gente pague más; queremos defender que acá no es un privilegio tener calor en las casas sino que es una necesidad pero lo estamos planteando de una manera diferente, para que sea sustentable en el futuro”.

Lo interesante es que hay varias propuestas para realizar una política energética con una base ciudadana. Esta información es relevante y se une a los insumos que como región puedan tomar decisiones de cómo ven la política energética al 2050”.