Corrientes- Se trata de una medida que abarca a la jurisdicción capitalina y que se mantendrá hasta que se confeccione el Plan Hídrico Integral y se realicen obras estructurales que eviten inundaciones. Abarca a lugares como Laguna Soto, Bejarano, Yecohá e inmediaciones de San Luis y Santa Ana.

El Departamento Ejecutivo Municipal (DEM) decidió a través de la Resolución N° 1696/2017 suspender las habilitaciones para la cosntrucción de clubes de campo, countries, complejos recreativos-residenciales, barrios privados y cerrados en toda la jurisdicción capitalina hasta que no haya confeccionado un Plan Hídrico Integral y la ejecución de obras de mayor infraestructura que prevengan de anegamientos.

A través de la decisión, la Comuna impedirá la construcción de nuevos complejos habitacionales en las zonas bajas e inundables, que son los desagües naturales de la Capital hasta que el Instituto Correntino del Agua y el Ambiente (Icaa) realice los diagnósticos y las normativas para prever problemas en materia hídrica.

La medida busca evitar nuevos inconvenientes como las que se registraron en abril y mayo cuando las fuertes tormentes afectaron a miles de ciudadanos que viven en zonas bajas de la Capital o cerca de bañados y esteros, como a la vera de las rutas N° 5, 12, 43, 98 y 99 y los barrios Yecohá, Bejarano, Santa Rita, San Ignacio, Laguna Soto, entre otros. La medida surge tras las graves inundaciones de meses atrás y a pocos meses del cambio de gestión municipal.

La suspensión de la aprobación de dichas urbanizaciones regirá hasta que el Icaa, como organismo de contralor, cumpla con la realización del Plan Hídrico Integral para todo el territorio municipal de la Capital y se concreten las obras estructurales imprescindibles que surjan de un análisis y diagnóstico del estado en el que se encuentran las zonas inundables de la ciudad.

La Comuna capitalina expresó en un comunicado que a raíz del proceso de expansión urbana desmedida generada en los últimos años y a la utilización de los clubes de campo, se generó “una excesiva densificación que no se corresponde con la necesidad de absorción hídrica de la zona”, haciendo referencia a las partes de la Capital ubicadas en Laguna Soto y camino a Santa Ana, que tuvieron los mayores problemas con las tormentas de abril y mayo.

Señala la Resolución Municipal N° 1696/2017, los informes técnicos actuales no cuentan con estudios hídricos que determinen las medidas estructurales necesarias para la definición de las áreas periurbanas óptimas para la urbanización, ni tampoco aquellas necesarias para soluciones a los problemas generados por la expansión de los barrios privados y cerrados y los nuevos complejos habitacionales construidos sobre zonas inundables. También señalan la necesidad de buscar soluciones a la situación “sin modificar ni disminuir la capacidad de absorción de los suelos y su desagüe hacia el río Paraná o arroyos”.

La suspensión por parte de la Municipalidad surge como respuesta a los problemas que se registraron meses atrás, ante los volúmenes extraordinadios de lluvias y persistirá hasta que hayan medidas que contemplen estudios y obras hídricas en las zonas afectadas.