De acuerdo a lo que está fijado en el Presupuesto 2018, la provincia de Catamarca es la que menos recursos recibirá para ser destinados a la obra pública.

Las transferencias automáticas a las provincias por recaudación impositiva ($894.062,9 millones) se compondrían de la Coparticipación Federal de Impuestos ($717.761,2 millones), seguidas de otras transferencias automáticas por leyes especiales ($176.301,7 millones).

Estas transferencias serían un 22,3% superiores a las presupuestadas en 2017 y 21,2% por sobre las estimadas para el este ejercicio, según un informe de la consultora Economía & Regiones. Adicionalmente, las provincias también percibirán de manera automática los fondos pertenecientes al Fondo Federal Solidario, por $25.618 millones, -2,9% por debajo de lo que se espera percibir en 2017.

Si se tienen en cuenta los principales programas con incidencia en las políticas sociales y de infraestructura provincial que componen las transferencias discrecionales a provincias, se tiene que para el 2018, estos programas seleccionados comprenden transferencias por más de $75.149 millones, cifra 2,7% superior a la selección comparable del año 2017.

Dichas transferencias se distribuirían jurisdiccionalmente entre el Ministerio de Educación (48,5%), el Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda (36,3%), el Ministerio de Desarrollo Social (9,4%), el Ministerio de Transporte (3,3%) y el Ministerio de Salud (2,6%).

También existen fuera de las órbitas ministeriales las Obligaciones a cargo del Tesoro, dentro de las cuales aparecen transferencias a provincias en forma de Asistencia Financiera por $672 millones.

En términos per cápita, la provincia de Tierra del Fuego surge como la más beneficiada, con un gasto anual de 9.524 pesos por habitante, un 404% más que el gasto consolidado por habitante ($1.891). En el extremo opuesto se encuentra Buenos Aires con $1.144 por habitante, recibiendo casi un décimo del gasto equivalente registrado en Tierra del Fuego.

En términos relativos, Buenos Aires es la más beneficiada (23,7% del total), seguida de la CABA (13,6%). Las que menos recursos reciben son las provincias de Santa Cruz (0,9%), San Luís (0,8%) y La Pampa (0,7%).

En el marco de la ANSES, se efectúan transferencias al sector privado que “devuelven” parte de lo retenido sobre la coparticipación de impuestos con programas como la Asignación Universal para Protección Social (AUPS) que comprende a la Asignación Universal por Hijo, la Asignación por embarazo y la Ayuda Escolar Anual o como el Programa de Respaldo a Estudiantes de Argentina, PROGRESAR. Para el 2018, ambos programas totalizan $84.341 millones.

La asistencia financiera a provincias está presupuestada en $33.154 millones. La misma incluiría el financiamiento por parte del FGS. Por otro lado, crece el monto presupuestado en el Fondo Federal de Financiamiento de Infraestructura Regional y el Fondo Federal de Desarrollo Provincial. No se contemplaría una nueva reprogramación de los servicios de la deuda del Programa Federal de Desendeudamiento Provincial.

El gobierno nacional incorporó al Presupuesto una serie de obras públicas que ejecutará en las provincias por un total de $50.322 millones, destinadas principalmente a inversiones en Transporte, Vivienda, Educación y Energía.

En el caso de Catamarca, está casi última en la cantidad de recursos que se destinarán a la obra pública, con un total de 458 millones de pesos, mientras que Buenos Aires, por ejemplo, tiene previsto recibir 12.970 millones de pesos.

Esta fue una de las quejas que expuso públicamente la gobernadora Lucía Corpacci días atrás en el marco de la entrega de viviendas, lo que debería disminuir notablemente si solo se tiene en cuenta el presupuesto de las partidas nacionales.

A modo de detallar la cuestión, Corpacci había marcado que Nación tiene previsto enviar para el tema viviendas 400 millones de pesos y cada vivienda está presupuestada en 1 millón de pesos. Si se tiene en cuenta estos números, generaría que Catamarca entregue diez veces menos viviendas que en años anteriores.