Repitiendo el buen suceso de años anteriores, la AEV organizó ayer su Coloquio sobre “Acceso a la Vivienda”. Un calificado grupo de expositores ilustró la temática  con su visión particular, derivada de su reconocida experiencia. Hubo una coincidencia generalizada sobre la necesidad de resolver este problema, que por falta de soluciones concretas, ha terminado por convertirse en una plaga casi endémica de la que el país no se puede desprender.

De las diferentes exposiciones merece destacarse la coincidencia de opiniones sobre uno de los aspectos relevantes de la solución habitacional para los sectores de menores recursos y los de ingresos medios de la población: la necesidad de contar con instrumentos financieros que permitan mantener el valor de los ahorros para de esa forma ir creando el mercado de capitales y el financiamiento de largo plazo con tasas reducidas que cualquier solución requiere. Los ejemplos de Chile con su unidad de fomento y de Uruguay con un régimen similar, expuestos por Guillermo Laura y Julio Villamide de la Cámara de Construcción del Uruguay, se sumaron a la propuesta sobre unidades de valor inmobiliario desarrollada dentro de un plan integral de acceso a la  vivienda elaborado por la Fundación Mediterránea, expuesto en la ocasión por su Presidente Martin Amengual.

Igualmente interesantes por su revelador contenido fueron las exposiciones realizadas por Dan Adaszko del Observatorio Social de la UCA y de Gustavo Llambías  de la AEV. Con datos fehacientes ilustraron sobre la magnitud y la preocupante tendencia que se advierte en el déficit habitacional. Igualmente interesantes resultaron las restantes exposiciones brindadas por Claudio Zuchovicki, Rodolfo Morello, Eduardo Levy Yeyati y la de los representantes de entidades bancarias oficiales vinculadas con el tema, Alejandra Caballero, Jorge Eduardo Buero y Emilio Basabilvaso.

Dijo el presidente de la AEV, Miguel Camps: “contar con el techo propio es una prioridad nacional; el problema de vivienda afecta al 50% de las familias en la Argentina. En la clase media, 6 de cada 10 familias quieren comprar una primera vivienda o cambiar la actual y no tienen modo de hacerlo. Queremos concientizar a la opinión pública de esta acuciante demanda social”.