Entregan premio Alarife Público a arquitecto camagüeyano
Camagüey.- El arquitecto Carlos Rafael González Morgado, con una amplia trayectoria en ese campo en función de preservar los valores patrimoniales y el enriquecimiento espiritual de El Camagüey, se hizo acreedor del Premio Alarife Público Fulgencio Aranbura, instaurado por la Oficina del Historiador de la Ciudad.
El objetivo del galardón, recibido durante la sesión matutina de la segunda jornada del Simposio Internacional Desafíos en el Manejo y Gestión de Ciudades, que tiene lugar en el Centro de Convenciones Santa Cecilia, es estimular y reconocer la labor de los profesionales en el amplio sentido de la palabra, ligados a las intervenciones en las ciudades y, sobre todo, aquellas ligadas a sus valores patrimoniales.
En esta octava edición se valoraron por el jurado, además de González Morgado las nominaciones de Mabel Teresa Chao Yeras por la Facultad de Construcciones de la Universidad Ignacio Agramonte de Camagüey y Ricardo Verduy, jefe de brigada de la Empresa Provincial de Restauración y Conservación de la Oficina del Historiador de la Ciudad.
En el dictamen del jurado, leído por el arquitecto Henry Mazorra, se hizo mención de que se tuvo en cuenta el hecho de premiar a personas e instituciones en el área de la arquitectura y el urbanismo con una contribución , de manera destacada, a la salvaguarda y la protección del centro histórico de la ciudad de Camagüey o favorecido al desarrollo y consolidación de una loable gestión económica, política y cultural, a través de un cuerpo teórico práctico que asegure desarrollar acciones científicas o apoye la materialización de proyectos arquitectónicos o urbanos.
En su haber aparecen: la remodelación del edificio del Poder Popular provincial, el microdistrito planta mecánica, el instituto superior de ciencias médicas Carlos J. Finlay, el proyecto de viviendas para la plaza Ernesto Che Guevara de Santa Clara, el hostal Camino de Hierro, los mercados de La Caridad y Santa Rosa, el diseño de interiores del hostal La Tula, los vitrales de la academia de arte Vicentina de La Torre y de asesor en la elaboración de la maqueta del centro histórico.
Fuente: Adelante, Cuba