Ciudades chinas estarán convertidas en el panorama para un mayor esfuerzo del rendimiento energético en los edificios, bajo un nuevo programa piloto entre China y Estados Unidos (EEUU). El memorándum de compromiso fue firmado en el simposio de Estados Unidos y China dedicada a la adquisición de servicios energéticos en Beijing el pasado jueves.
 
El nuevo plan destinado a compartir conclusiones, experiencia y buenas prácticas entre los dos países, en bienestar de una difusión de las empresas de servicios energéticos (ESE). El modelo ESE prevé la formalización de contratos de eficiencia energética entre el propietario del edificio y una empresa particular, a través del cual la inversión inicial en la rehabilitación energética está garantizada por la empresa y se paga por los ahorros conseguidos.
 
El modelo no es nuevo en China, por ejemplo, la ciudad de Shenzhen, provincia de Guangdong, en el sur, las autoridades locales aplican la contratación de eficiencia energética como el principal motor de la eficiencia en los edificios públicos.

De acuerdo a los datos presentados en el simposio, para junio de 2014, Shenzhen ya ha implementado contratos ESE por cerca de siete millones de metros cuadrados construidos. Además, la ciudad china ha trabajado con su propia plantilla de presupuesto en materia de energía, basado en la intensidad energética de cada edificio.
 
Adivinar la complejidad de la promoción de un modelo de ESE a nivel nacional en China, es una meta para el Laboratorio de Berkeley del Departamento de Energía de Estados Unidos que considera que en un mejor estado los beneficios de un enfoque local. “Si bien los cambios de política en escala nacional son complejos y largos, ciudades y provincias chinas frecuentemente sirven como primeros adoptantes [early adopters]”, recuerda la entidad, el informe Ampliación contratos de eficiencia energética en China, publicado en enero.
 
El nuevo programa piloto anunciado ahora establece que cada proyecto implementado se reúnen por lo menos una empresa de servicios energéticos chinos y un estadounidense. Además, el enfoque propuesto para cada proyecto debe prever la reducción de los niveles de consumo de energía en un 25%.