En la ya tradicional fiesta con la que esta multi cierra el año, la mayoría tenía la marca de un 2009 muy duro. Algunos datos: las ventas en el primer trimestre se desmoronaron 60%, la cotización del acero se derrumbó 50% y la planta operó hasta julio al 60%.

A Paolo Rocca, accionista y presidente de Techint, le tocó hablar sobre el auténtico motor de un grupo que factura US$ 26.000 millones en el mundo y que conquistó el primer lugar en el planeta con sus tubos de acero para la industria petrolera. En su discurso, según contaron varias fuentes a Clarín, Rocca se detuvo en cómo se desenvolvieron en la crisis y anunció el relanzamiento del plan de inversiones que el crack financiero había obligado a postergar. Se trata de la construcción del Alto Horno 1, cuya terminación está prevista para el primer semestre de 2010 y de obras demoradas como la Colada Continua, el puerto y el laminador. Rocca no comentó cifras y consultados, en la empresa, no arriesgaron números. Sin embargo, según se informó a la Bolsa en octubre de 2008, esas inversiones eran por US$ 1.200 millones.

Rocca admitió que 2008 y 2009 fueron muy difíciles para Ternium, el conglomerado de firmas de acero plano de Techint pero que en su opinión los malos momentos habían quedado atrás. Señaló que la próxima meta de Siderar es llegar a 4 millones de toneladas de producción y pronosticó que Ternium se consolidará como líder en América latina. Pero no todas son rosas. En la Argentina las ventas del acero que se utiliza en la construcción, autos y electrodomésticos, entre otros, cayeron 49% en los primeros nueves meses. Y la empresa está operando hoy al 75% de su capacidad productiva.

Fuente: Clarín, 30/11