Buscan evitar hechos de inseguridad sobre el trazado; mide dos metros de alto y tiene una extensión de más de cinco cuadras El enrejado está siendo levantado desde la semana pasada.

Un nuevo enrejado antivandálico está siendo colocado desde la semana pasada a un costado de la autopista Illia, con la finalidad de evitar la caída de objetos que puedan poner en peligro a los conductores. El viejo cerco, que divide el trazado de la Villa 31, está desmejorado y la idea del gobierno porteño es renovarlo.

Desde la semana pasada, la empresa estatal Autopistas Urbanas (AUSA) realiza el recambio del alambrado que separa las casillas de la vía rápida a lo largo de 550 metros. El tejido era colocado sobre muretes de cemento de unos 65 centímetros de alto.

Desde AUSA explicaron que el viejo enrejado, levantado en 2007, se encuentra muy deteriorado y la idea es renovarlo para garantizar tanto la seguridad de los conductores como la de los habitantes de la Villa 31, que quedan expuestos a la caída de objetos ante un accidente de tránsito.

En los últimos meses, han sido habituales los hechos de inseguridad en la zona, producto de la caída de piedras sobre el trazado. La medida busca también evitar que individuos crucen a pie la autopista.

Fuente: La Nación