Por Horacio Tarrab,
socio de Creadores de Ambientes (creadoresdeambientes.com)

Los ambientes pequeños pueden ser asfixiantes, pero si se los resuelve con creatividad también son una buena opción para quienes acceden a su primer departamento o para aquellos que pasan más tiempo fuera que dentro de su casa.
El primer consejo es optar por darle a la caja (paredes, pisos y techos) un tono claro para que la luz se luzca mejor. La explosión de color puede darse con accesorios (telas, cortinas, adornos, muebles pequeños) o solo en un muro que sea el que se lleve la atención.
Si de reformas se trata hay varios secretos que se pueden aplicar. Primero hay que evaluar las aperturas. Si hay puertas ventanas hay que aprovechar la iluminación natural que entra de allí, por eso se puede poner un espejo en la pared que se enfrenta, sobre todo si se refleja un exterior con naturaleza. En el caso de que haya un balcón de dimensiones interesantes (que entre una mesa con sillitas, por ejemplo) se lo puede cerrar, obviamente con un cerramiento vidriado para no agravar la sensación de pocos metros.

Cocina integrada sí, cocina integrada no
Las cocinas integradas han marcado un hito en la construcción moderna, pero para muchos pueden ser incómodas o sentir que se expone mucho su privacidad. En estos casos una buena solución es levantar una pared de ladrillos de vidrio que impiden ver qué hay del otro lado, pero no quitan por completo el paso de la luz. También se puede dejar un pequeño lugar para pasar los platos, para no cortar por completo la comunicación entre los ambientes y si hubiera suficiente lugar se puede poner una mesa rebatible del lado de la cocina para que sea un desayunador o lugar de apoyo en casi de necesitarlo.
Otra disyuntiva que se presenta en las casas que tiene un living pequeño y además un comedor es si vale la pena unirlos o no. En la mayor parte de los casos es muy útil tirar la pared que los separa o abrir una apertura, pues así se puede continuar teniendo los dos espacios o generar nuevas ambientaciones. Por ejemplo, si el lugar es muy chico se puede hacer un living con mesa baja (pero no tanto) que sirva tanto para comer y también como centro de reuniones, y donde estaba el comedor se puede instalar un escritorio o un área de lectura.
Por último, los muebles multifuncionales son la gran solución, pues no conviene tapar el espacio disponible. Así, en el living se pueden poner cubos que sirvan como asientes y al unirse sean una mesa baja o tener un escritorio con tapa para que al cerrarla no se vean tantos objetos. Una opción muy interesante para monoambientes son los cerramientos deslizables de los placares que se aplican también para ocultar los equipos de audio y video y hasta la cocina y sus alacenas.
Por supuesto, antes de planear estos cambios hay que analizar cuáles son las prioridades y necesidades de cada familia, pues esto irá marcando los pasos a seguir.