Referentes de las ladrillerías capitalinas manifestaron que a raíz de la pronunciada bajante del nivel del río Paraná que se viene registrando en los últimos meses, los obrajes vienen contando con mayor disponibilidad de materia prima, por lo que hay un leve repunte en la producción de ladrillos.

Según explicaron desde la Asociación de Ladrilleros del barrio Molina Punta, actualmente poco más de la mitad de las 500 ladrillerías de la zona se encuentran trabajando, cuando meses atrás la gran mayoría estaba paralizada por la creciente del cauce fluvial y las copiosas lluvias.

“Estamos trabajando con lo que se puede y con lo que conseguimos. Al menos ahora que bajó el río podemos sacar un poco de tierra para reactivar las ladrillerías”, expresó el referente de la Asociación de Ladrilleros del barrio Molina Punta, Julio Abasolo. De las 500 ladrillerías por lo menos la mitad está trabajando, cuando hace unos meses eran mucho menos.